LA SERENA RANGI TEA
Camilo Rapu, Presidente de la Comunidad Indígena Ma’u Henua, contacta al alcalde de La Serena Roberto Jacob, para pedirle apoye el retorno de la escultura original a Rapa Nui. Para que la ciudad no se quede sin Moai, Ma’u Henua ofrece costear a un equipo de escultores y comprar una piedra de la zona para tallar un Moai, para que trabajen con piedra local y muestren su trabajo a lacomunidad. Así entre enero y febrero de 2019 los escultores Rapa Nui Tony Hucke, Jhonny Tucki,Pepé Tuki y Pau Hereveri, tallaron un nuevo moai con roca extraída de la cantera de Juan Soldadopara dejarlo en nuestra ciudad. Pesa 4,5 toneladas y sus ojos fueron confeccionados con coral yobsidiana, los que son puestos sólo en acontecimientos especiales e importantes, ya que simbolizan su despertar.

Bautizado como La Serena Rangi Tea, que significa “Cielo Blanco”, fue entregado por la comunidad Rapa Nui en la ex estación de trenes de La Serena en una emotiva ceremonia que contó con las autoridades de La Municipalidad de La Serena y de la Comunidad Indígena Ma’u Henua, sellando con este gesto de integración la presencia de la isla en nuestra ciudad. Desde ahora este Moai, se mantendrá en este espacio en el Coliseo Monumental, que congrega actividades culturales y artísticas nacionales e internacionales, permitiendo que residentes y turistas puedan conocerlo en un verdadero intercambio cultural.
MOAI ORIGINAL
Llegó en 1952 a La Serena tras un largo viaje por mar, siendo instalado en los faldeos del entonces Regimiento “Arica”, donde pudo ser visitado hasta 1973 cuando se cerró al público producto del golpe de Estado. La versión de aquella época decía que se trajo como gratitud de los isleños por el vuelo de Manutara, que despegó el 19 de enero de 1951 desde el aeropuerto La Florida de La Serena uniendo por primera vez el Continente con Rapa Nui tras casi 20 horas de vuelo, pero en 2018 la Comunidad Ma'u Henua, en el marco de su lucha por recuperar sus piezas arqueológicas ancestrales, aclaró que no fue una donación de su pueblo sino una decisión de la Armada que en ese entonces administraba la isla.

En 1987 fue trasladado a una nueva ubicación, quedando en la subida de calle Colo Colo, donde permaneció mirando hacia el mar desde lo alto de la ciudad por varios años. Para evitar las acciones que pusieran en riesgo este valioso patrimonio, fue trasladado al Museo Arqueológico de La Serena en octubre de 1996.